Compañerismo, compromiso con el club y respeto El ex jugador Ramón Gómez, tiene en claro el mensaje que le baja a sus dirigidos de la Escuela de Fútbol Ángel Labruna (EFAL).

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En la cancha auxiliar del monumental, las categorías 2008/07, 2006/05 y 2004/03 de River Rojo de la EFAL enfrentaron a la AFALP por la séptima fecha del campeonato.

El “mono” Gómez, director técnico de los chicos, se encuentra desarrollando este rol en el club hace aproximadamente 10 años y es una pieza fundamental en el crecimiento de la escuela. Además, ejerció toda su carrera en la institución riverplatense, iniciando a los nueve años hasta llegar a debutar en la primera división como jugador profesional.

Al finalizar la jornada, Ramón Gómez, dialogó con el sitio oficial del club.

-¿Cuál es el mensaje que le bajas a los chicos de la EFAL?

- Lo primero que acá intentamos de inculcar es que, si les gusta el fútbol, que se dediquen a pleno, y a partir de ahí venir a tratar de mejorar día a día, y si la ilusión de ellos es ser futbolistas, no tienen que tener otro deporte en mente; porque es perder el tiempo, por lo menos de lo que a mí me parece. Después, los valores del compañerismo, compromiso con el club, respeto y disciplina, el fútbol te da todo eso, si vos lo interpretas de la buena manera, y tenes en la cabeza ser alguien en este deporte, tenes que escuchar a los grandes y obedecer, ningún técnico de va a aconsejar mal.

- A veces los chicos tienen presión a la hora de jugar a la pelota ¿vos les trasmitís la experiencia del Metropolitano del 75´, cuando jugaron ustedes, los jugadores de la tercera?

-Sí, casi siempre les comento nuestras experiencias de inferiores, de haber jugado ese partido y la de estar en un plantel profesional. Pero para llegar a eso es un recorrido muy largo que tiene que hacer, y es el día a día, más en River donde se prueban diez mil pibes por año. Acá es un recambio total, porque viene uno mejor y se queda ese, la competencia en el fútbol es esa, entonces tenes que pensar, mirar para adelante y crecer, eso te va a llevar a pelearla.

-¿Crees que haber sido jugador profesional te da un plus a la hora de ser entrenador?

-Yo creo que sí, uno tiene más experiencia no solamente en la cancha sino en un vestuario, en la manera de manejar un grupo, porque por más que sea escuela de fútbol, no deja ser eso, fútbol.

-¿Cuál fue la meta que se pusieron con la escuela a comienzo de año?

-La meta es alimentar los valores principalmente de persona, eso primero que todo, y a partir de ahí comienzan a ser futbolistas, por que empiezan a convivir, respetarse con sus compañeros, copiarse lo bueno, no reírse si al otro no le salen las cosas, eso te hace cada vez más hombre y vos ya no te distraes, entonces te abocas pura y exclusivamente en aprender.

Te hablo en primera persona, vine a los nueve años a River, una vez me acompaño un hermano a probarme y quedé, después de ahí nunca más nadie me acompañó hasta que empecé a jugar en tercera, me las arreglé solo, a veces me venían a ver en inferiores, séptima, sexta… pero quería llegar. También mientras jugaba pensaba y escuchaba a los técnicos, quería ser lo que soy hoy, trasmitirles a los pibes todo lo que aprendí con los profes que tuve. Uno siempre aspira a más, en esto nunca se deja de aprender. Esta es una frase hecha y vieja pero es la realidad “el fútbol te enseña todos los días algo”, uno aprende los errores de los chicos.

-¿Cambiaron los tiempo con respecto a la época en la que vos entrenabas a la actualidad?

-Sí, cambiaron los tiempos, la forma de entrenamiento, los métodos, pero el fútbol sigue siendo once contra once, la pelota sigue siendo la misma. Hay mucha tecnología hoy, mejoraron las canchas, en la época nuestra jugábamos en campos de tierra, pelotas que se mojaban y pesaban cinco kilos, los botines son otros y todo eso ayuda a que el jugador mejore, se motive se sienta importante… pero bueno el objetivo siempre es el mismo.

- Habiendo integrado varios planteles y jugado en tantos clubes ¿Qué debe tener un equipo de Ramón Gómez?

- Yo tuve la suerte de jugar acá, me crie en River, mi clase es la cincuenta y seis. Tuvimos la suerte nosotros de ganar desde infantiles hasta sexta división todos los campeonatos sin parar. De ahí saltamos a tercera, salimos campeones también y luego ganamos la final del 75´.

El fútbol para mi es buen pie, principalmente eso es lo que le inculco a los chicos, los trabajos son mejorar constantemente la técnica, a partir de ahí podes arrancar para donde quieras. Me desarrollé en buenos equipos por suerte, mi mentalidad es la de River, ganar jugando bien.

Por Carlos Di Martino