“Vamos a enfrentar a un rival que viene elevando su confianza, que cambió al entrenador y que viene ganando. Será un partido difícil, pero sabemos a lo que nos vamos a enfrentar. Intentaremos imponernos a través de la idea que tenemos. Conocemos lo exigente que son estos encuentros, más en una cancha muy compleja y muy rápida”, indicó Marcelo Gallardo sobre el cruce de este martes por la Copa CONMEBOL Libertadores.
El DT agregó: “Hay equipos fuertes. A partir de octavos de final, los errores que se comenten se pueden pagar caros. Son partidos de 180 minutos y los momentos de los equipos también son fundamentales”.
En cuanto a las últimas presentaciones, compartió: “El partido del viernes fue importante porque estábamos enfrentando a un equipo que venía muy bien. Sirvió para poner en juego a algunos futbolistas; pudimos darles minutos a Nacho y a Borré. Considero que vamos bien. Hoy tengo a todo el plantel en su totalidad y veremos cuáles son las mejores alternativas para encarar lo que viene”.
“Yo analizo todo el contexto del partido y no sólo el inicio. A veces uno se queda con lo que plantea inicialmente, pero también hay que evaluar lo global y todo lo que puede pasar en 90 minutos. Nuestra idea sigue siendo la misma: no ceder el protagonismo y que los rivales no nos condicionen a través del juego”, explicó Gallardo.
En esta misma línea, el Muñeco expresó: “El equipo está bien. Hubo dos momentos que tuvimos que atravesar: el parate larguísimo y el deseo tan gran de volver a la actividad. Al equipo se lo vio bien y hasta superador en el primer momento. Ahora empezó el torneo local, tuvimos también que acomodarnos. En los últimos partidos tuvimos muchos jugadores afuera por las convocatorias y las lesiones. Igualmente, estuvimos bien dentro de ese contexto”.
Además, Gallardo elogió a Ponzio: “Después de este extenso parate, a sus 38 años, podría haber sido de los futbolistas que más sufrieran y sin embargo es un jugador que demuestra que una situación como la que estamos viviendo no lo hizo bajar los brazos. Eso se debe a una gran mentalidad y fortaleza anímica y ser parte de un grupo de jugadores que compite por algo. El deseo de competir está en su ADN y eso es bueno para los jóvenes, que ven ese reflejo en él. Si a Leo le toca jugar, apoya desde adentro; si no, es uno más también. Eso para nosotros es muy bueno y lo hace un jugador de muchísima importancia para nuestro grupo de trabajo”.
Por último, comentó: “El mensaje siempre es el mismo, pero los jugadores entienden cuáles son los momentos que se atraviesan. Ellos ya me conocen, saben que no les regalo nada en cuanto a lo que jugamos”.